Saturación prenavideña, o como lo exclusivo deja de serlo

Hacía mucho tiempo que no me veía inmersa en la sección de juguetes de un centro comercial y la experiencia ha sido, cuanto menos, peculiar.

Lejos de pensar que nuestros pequeños, con esa gran diversidad de juegos y muñecos, se divierten más de lo hacíamos los que nacimos en los 70, pienso que deben sentirse saturados, abrumados por tanta variedad. Quizás no. Ellos no van a comprar, sólo piden. Son sus mayores los que no saben ni por dónde empezar...

Lo que más me llamó la atención fue que aquella mascota que era mi preferida en la infancia, Hello Kitty, podías encontrar cualquier producto, apto para menores, que pudieras imaginar. Recordé que cuando era niña sólo vendían cosas de esta gatita, o eso me decía mi madre, en la tienda "Cosas", que estaba en la Plaza de Felipe II de Madrid. De aquellas, entrar en aquel espacio era para mí como entrar en el paraíso, mucho más cuando convencía a mamá de que me comprara "algo de Hello Kitty pero no muy caro" (que bien enseñada me tenían). A veces salía de la tienda con algo de Cuca Dols, que no molaba tanto, pero creo que era más barato, y además estaba feo exigir regalos fuera de Navidad o cumpleaños (en mi caso estas fechas coinciden), así que salía de la tienda tan contenta.

Los niños ya no piden una mochila, una guitarra, un "Quién es Quién" o un ordenador en genérico. Lo piden de la gatita en cuestión, de la esponja o de otros que no sé ni cómo se llaman. Tan pequeños y ya fijándose en la etiqueta... Yo hacía lo mismo (con menos alternativas, eso sí), otra cosa es lo que me compraban...

De un tiempo a esta parte le estaba cogiendo manía a Hello Kitty, pero después de tanta saturación me voy a pensar si seguir conservando mi primer monedero, que yo creía casi exclusivo... bueno, pensaré que de entonces lo era y que ahora es vintage.

Canción con emoción

Después del concierto de Iván Ferreiro de Chantada, del cual os dejo una imagen, que fue algo inesperadado, porque me pilló de camino en plenas vacaciones, y del que disfruté muchísimo, tenía mis dudas sobre si ir o no al Picnic Extraterrestre del pasado viernes. Finalmente, decidí que un concierto de Ferreiro o Los Piratas en la Riviera, más allá de la acústica, nunca me ha defraudado, y allí me planté.


A Najwa nunca la había visto en concierto y me despertaba curiosidad, y he de decir que sorprendió. Stanstill fueron e hicieron su trabajo pero para mí poco más. Iván, tras la experiencia lucense, estuvo poco comunicador y no muy intenso.


Sin embargo, una vez más él hizo algo que me emocionó, eso es lo que busco al ir a cualquier espectáculo, la emoción, y con sus canciones en directo suelo conseguirlo.


Cuando entró en escena para acompañar a Najwa en Como un animal, lo hizo cargado de energía, actuando como un buen compañero en un momento tenso, aportando esa carga de emoción que en ese momento, al menos yo había perdido. Una vez más evoco una imagen, la de ambos abrazados al acabar la canción, aquel instante me conmovió.


Esta vez no fueron las letras de sus canciones las que me llegaron, ni sus gestos, ni sus guiños, ni su contar historias, fue ese detalle, esa imagen, esa sensación lo que me emocionó. 


Gracias a ambos por ese instante, pero para la próxima, me voy a ver a Ferreiro y a su banda o en terra galega o en un espacio más cálido, más cercano.

Pensando en imágenes

El viernes pasado tuve la suerte de poder asistir, en el Museo Reina Sofía, en la Sala del Guernica, con esa maravillosa obra de arte, que tanto representa en nuestro país, como fondo a la lectura dramatizada de El deseo atrapado por la cola («Le désir attrapé par la queue», título original en francés). Este texto fue escrito por Picasso en 1941, cuatro años después de pintar el Guernica, en Francia durante la ocupación alemana y describe, en tono de farsa surrealista, la realidad social de la época.


La primera lectura de este texto se celebró en el apartamento del matrimonio Leiris, el 19 de marzo de 1944 (la foto es de aquella lectura). Albert Camus dirigió la puesta es escena y el reparto fue de excepción: Michel Leiris (Le Gros Pied), Raymond Queneau (L’Oignon), Zanie Campan (La Tarte), Simone de Beauvoir (Sa Cousine), Jean- Paul Sartre (Le Bout Rond), Louise Leiris (Le Deux Toutous), Jacques-Laurent Bost (Le Silence), Germaine Hugnet (L’Angoise grasse), Dora Maar (L’Angoise maigre) y Jean Aubier (Les Rideaux).


Mi experiencia de esta lectura dramatizada es una de esas cosas especiales, difíciles de olvidar. Más allá de mi dificultad para entender un texto surrealista (que no tiene porqué ser entendido, al menos no racionalmente), durante casi una hora disfruté no sólo de la escena que tenía ante mis ojos, evoqué todas esas imágenes a las que evocaba el texto, incluso identifiqué alguna imagen descrita en el propio Guernica. Dejé volar mi imaginación mucho más allá de la realidad para pensar y recrear sólo imágenes. Maravilloso.

Periodismo 2.0

Hace algunos años cuando en la Facultad de Ciencias de la Información maquetábamos con tipómetro y lo más cercano a periodismo on line que veíamos eran algunas newsletters, algunos osados hablaban de que en el futuro los medios serían participativos y con la capacidad de obtener un feed-back inmediado. Por aquel entonces, aquello parecía poco menos que ciencia ficción.

A día de hoy, unos diez años después, parece que es real.

Me planteo: ¿qué diferencia a un periodista de un blogger? Parece obvio pero me cuesta darle respuesta...

Lo primero que se me ocurre que ofrece el nuevo entorno es poder hablar en primera persona, el blogger no tiene porqué seguir una línea editorial, y la objetividad, ese gran dilema del que tanto discutí con aquellos que se hacían llamar mis maestros, desaparece.

La capacidad de respuesta de los lectores y del que escribe, convierte al blogger en alguien mucho más cercano pero también está mucho más expuesto de lo que que estaba el periodista tradicional porque el que recibe la información puede estar de acuerdo o no con el que escribe, y además puede expresarlo libremente.

Es fundamental también la libertad que supone no escribir para nadie, ni estar obligado a lo que impone la agenda. Esto abre un abanico muy amplio y realmente permite el acceso a una información muy especializada.

Seguro que hay muchas más respuestas, así que seguiré navegando por el 2.0 a ver si encuentro alguna más. Pero esto consiste en participar, ¿no?, así que también espero las vuestras.

Probando, probando

Mucho tiempo, demasiado, para comenzar a editar estas páginas. En el listado de tareas pendientes: empezar con el blog. Miedo a la primera página en blanco, a qué decir, a qué contar...

Cuando decidí que estaría bien tener un blog, pensé en que fuera la continuación de mi Fotolog, elmundodesonja, de hecho, este blog comienza siendo homónimo del mismo y con un diseño bastante parecido....

Como últimamente me faltan las palabras y las ideas continuaré expresando lo que me pasa mediante imágenes.

Para aquellos que no lo visitasteis, aquí os dejo un enlace a otro tiempo,  a otra etapa,  a otro mundo...